13 agosto, 2020

HISTORIA DE LABORATORIO DE OBJETOS

Acá estoy yo. Saliendo de mi área confort, como le dicen ahora. No me gustan las fotos, no estoy acostumbrada a estar de este lado y por algo mi proyecto se llama “Laboratorio de Objetos” y no se llama Pao Arduino: me siento mas cómoda detrás de escena y siempre fue así.

Lo que no quiere decir que así sea eternamente: la gente cambia y por eso yo intento no ponerme etiqueta. La verdad, a esta altura llevo varias versiones de mi misma y aunque cueste, siempre es bienvenido el cambio. Despabila.

Laboratorio de Objetos cumplió 9 años y en todo este tiempo no ha hecho mas que sacarme del área de confort, una y otra y ooootra vez. No digo nada nuevo que no haya dicho antes cualquier emprendedor.

Para quienes no conocen la marca ni como empezó les cuento que trabajé en marketing para marcas de ropa, después trabajé en arte y vestuario para cine y un día empecé a restaurar con mis propias manos.

Venía de un momento complicado que necesitaba sanar y el trabajo manual resultó ser una gran terapia. Empecé con un taller + un blog. Durante la semana restaurataba y solo atendía los sábados con cita.

Un año después abrí una tienda muy chiquita y así fué creciendo la marca hasta convertirse en el equipo que hoy la conforma.

Esto de emprender ha sido un camino de prueba y error.

De aprendizaje sobre todo (hacia adentro y hacia afuera).
De gran compromiso y amor por lo que hago.
Y de mucho agradecimiento también.
Porque soy de las que creen que esfuerzo + talento son indispensables pero no siempre suficiente, también se necesita suerte.

chevron-down